...

Cuando se es invisible... puedes hacer que una música suene para que, al menos un alma se percate de tu humilde presencia...y hasta quizá note cómo a través de un tímido violín... una silenciosa lágrima empiece a deslizarse... por una cálida mejilla.

y ahí está Schumann para facilitar la labor...

Por los invisibles.

http://www.youtube.com/watch?v=u9cGMoN0DnQ&eurl=http%3A%2F%2F

Comentarios

Entradas populares de este blog

A ratos...

Jeroglíficos de cumpleaños.

23 + 30