Entradas

Mostrando entradas de 2013

¡Feliz, feliz, feliz, pero que muy Feliiiiz Año Nuevo!

Imagen
Debo reconocer que me da cierta pereza escribir una entrada para despedir el año, pero es que este año me ha dado tanto, tanto, que creo que es casi una obligación.  [¿qué mejor brújula que el corazón...?] Vamos a ponerle banda sonora a la entrada, como siempre... Es mucha la música que ha marcado este año (bueno, éste... y todos, pero la música que marca mi 2013 es peculiarmente especial...), pero si tengo que escoger, sin duda, tengo que quedarme con uno de mis mayores (para mí el mejor) logros musicales del año: https://www.youtube.com/watch?v=jM9qdor6GYs Mamma Mia! ha sido no sólo un gran reto, sino una manera increíble de descubrirme a mí misma, una forma de encontrar aquella luz que durante mis casi 20 años de conservatorio he andado buscando. A pesar de ese extraño e inútil sentimiento de culpabilidad que sienten algunos músicos de conservatorio cuando se sienten atraídos por una música "popular", cuando uno se propone luchar contra tanto dogma ab

Cruzar el río.

Imagen
Pedid... y se os dará.   Kenny G – Miracles H ace tiempo que quiero escribir, pero he estado tan ocupada descubriéndome a mí misma, que no he tenido nunca un tema claro sobre el que escribir. De repente escribir fue sustituido por reflexionar, meditar y pensar, resultado de la búsqueda de un método de auto-equilibrio más rápido y eficaz... Pero escribir es algo que me encanta. Y que me leáis, es ya la caña.  Generalmente, mis entradas vienen motivadas por algún conflicto interno. Y ésta no iba a ser menos...  Qué contrariados nos sentimos cuando llega alguien que menosprecia nuestra capacidad, por culpa de la ignorancia, por culpa de la mediocridad, de la superficialidad, de la envidia... pero, en definitiva, los últimos responsables de todo problema de subestimación somos nosotros mismos, nuestro autoconcepto... y nuestra capacidad para hacerlos valer y decir "¡Eh! ¡Aquí estoy yo!" Sí. Vale. Hay mucho cabrón suelto. Es difícil no tenerlo en cuenta.   Per

El Síndrome de la Novedad Excluyente.

Imagen
Siempre pasa igual.  La gente, los seres humanos, las personas... somos así: estamos acostumbrados a algo que es muy bueno, y, de buenas a primeras, se oye un canto de sirena que nos arrastra a una orilla que no solamente está lejana, sino que, encima, nos hace perder de vista cosas que, quién sabe, quizá cuando queramos volver a tener, sea demasiado tarde. ¡¿Cuánto tiempo sin escribir en LUEMP, verdad?! Han pasado demasiadas cosas, y por ello, en cierto modo, he abortado muchas veces el impulso de volcar mi ira contra mi blog. Tengo muchísimas entradas incompletas en mi bloc de notas, pero no he dejado que ninguna salga a la luz, son demasiado duras y sarcásticas; este año no ha sido fácil. Y en cierto modo ahora me alegro por ello; soy una persona LIBRE, en un amplio sentido. No todo el mundo puede decir eso, y menos aún si hablamos de la conciencia de más de uno.  Reflexionando sobre ese mundo al que supuestamente pertenezco, al conservatorio y su auto-deg

El Cero Siniestro.

Imagen
Hola Utópicos, aquí os dejo una entrada que escribí hace unos meses pero que no fui capaz de publicar. A continuación, publicaré la verdadera entrada nueva, ¡fresquita, actual y recién hecha! […someone to talk when I'm feeling alone…] (El vídeo es sólo para escuchar la canción, la imagen no es interesante). No sé si os ha pasado, pero, el caso… es que odio la sensación que se siente cuando captas que alguien tira la toalla contigo, y, a pesar de que sientes que es algo injusto, te bloqueas por la impotencia de no saber si eres del todo capaz de demostrar que no te mereces que alguien piense eso de ti. "Don't give up", me dice mi madre. Y yo no me rindo, pero… también estoy cansada de que seamos así las personas. Siempre tan a lo nuestro, siempre tan insensibles con las cosas que no nos interesan, siempre tan poco empáticos…  Aún peor es sentirte mal, necesitar una mirada cómplice y comprensiva, y buscarla justo en el momento en el que estás solo, y